25/02/2009
Pues
parecía que no iba a llegar, pero ya está
aquí Abel. Se ha colado en nuestras vidas,
y el cabrón se ha puesto el primero. Con
lo que yo paso a quinto lugar, después
de él, de la madre y las dos abuelas.
La
vida no cambia tanto como dicen. Solo en algunos
detalles, como que se te ha ido todo el tiempo
libre a tomar por culo, ya no duermes mas de 3
horas seguidas, y eso con suerte; ya solo lees
cosas de niños, y dejas aparcado y a medias
todo lo que tenías entre manos; llevo varios
años sin hacer ni un solo curso profesional,
pero ya me he apuntado a un taller de padres,
ya no hago nada de deporte, solo hablo de niños,
estamos hasta los güevos de los familiares,
el presupuesto familiar se jodió hace tiempo
así que eso no lo hemos notado mucho; hemos
descubierto el mundo de la cosmética infantil;
no tengo ni idea de lo que vamos a hacer en vacaciones;
vas a todas partes con 100 porsis y un bolso con
los porsis de los porsis del que no te separas;
no haces más que sobresaltarte porque hace
ruidos al respirar, pero si no los hace acercas
el oído a ver si respira; he pasado 37
años sin que me cagaran encima, y en 15
días me han cagado y me han meado…
Pero
vamos, que tampoco es tanto cambio.
Aun
así, sin saber por qué, uno está
feliz y contento.
Besos
y abrazos por doquier.
JuanRa